Técnica quirúrgica que lleva mucho tiempo evolucionando, actualmente es utilizada para ayudar a pacientes aumento de volumen corporal a perder masa grasa y verse mejor. Se debe seguir un régimen alimenticio posterior a la lipoescultura. Hay diferentes tipos de procedimientos:
Este procedimiento es lo último aplicado a nivel mundial, ya que al utilizar ondas sonoras tiene ventajas importantes frente a una lipoescultura clásica. Se trata de un brazo con una cánula de titanio, que genera ultrasonido y llega directo al tejido graso, donde previamente se le inyectó una solución especial (de Klein)que absorbe la energía vibratoria del ultrasonido diluyendo la grasa y transformándola en moléculas más pequeñas que son posteriormente fáciles de retirar.
La lipoescultura clásica se realiza mediante vacío. Durante el procedimiento se retira además del tejido graso, parte de nervios y vasos, trayendo más complicaciones como la alteración de la textura de la piel y un mayor sangrado dentro del procedimiento quirúrgico. Es por esto que es más recomendable la LipoVaser.
Otra de las ventajas de este procedimiento es que permite al cirujano dar una forma más armónica al cuerpo. Se logra retirar mayores volúmenes de grasa siendo menos invasivos en el procedimiento, además se tiene una mayor seguridad porque el paciente pierde una cantidad mínima de sangre.
Con esta técnica también existe la opción de hacerla con ´Ultra Definición´, que se encarga de marcar zonas específicas en el cuerpo tanto en mujeres como en hombres, como la línea media del abdomen, los abdominales, las líneas oblicuas y de la cadera, dando un aspecto mucho más atlético al paciente.
El tiempo de recuperación son de 3 a 7 días, pudiéndose notar los resultados finales entre los 90 a los 120 días posteriores al procedimiento. El paciente debe utilizar una faja por un periodo de 2 meses. Las cicatrices que deja el procedimiento son casi imperceptibles.
La Smart Lipo (in office) utiliza una fibra muy delgada de aproximadamente 2 mm de grosor que emite una luz 1064 de láser que es absorbida por el tejido graso, diluyéndolo y convirtiéndolo en aceite. Posteriormente con una jeringuilla se lo retira.
Se realiza con anestesia local, en el mismo consultorio (in office). Es ideal para zonas pequeñas (aproximadamente de hasta 15x15 cm cada una de las zonas), por ejemplo se puede hacer el abdomen y las ´llantitas´ de los costados en un mismo procedimiento, también la papada, cachetes, axilas, brazos, muslos, entre otros.
Otra ventaja de esta técnica, es que el calor producido al entrar en contacto con el tejido graso estimula a que la piel produzca nuevo colágeno y evita que quede flácida.
El paciente va al consultorio a que se le realice el procedimiento y puede inmediatamente retirarse a su casa. Dentro de las siguientes 24 horas ya puede volver a su actividad normal.
Los resultados finales demoran en verse entre 30 y 45 días luego del procedimiento, ya que como el láser produce una onda de calor que diluye la grasa, al cuerpo cuesta un poco más de tiempo adaptarse a esa ´quemadura´ que se hizo en el tejido graso, y que luego debe pegarse y acomodarse a posición final.
Consulte para mayor información acerca de este procedimiento y sus ventajas.